Las consecuencias de que el euro caiga bajo la paridad ante el dólar
Ello se debe a la fuerza del dólar, sostenido por la política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Contrariamente al Banco Central europeo (BCE), la Fed empezó rápidamente a subir sus tasas de interés para luchar contra la inflación. Esos tipos de interés elevados hacen más rentable la posesión de dólares, lo que atrae a inversores y aprecia aún más a la divisa. Por su lado, el BCE ha subido finalmente de forma moderada sus tasas, pero se ignora cuál será su política a largo plazo, y esa incertidumbre pesa contra el euro. «El BCE está en situación complicada. No puede subir de golpe sus tipos de interés ya que puede provocar una crisis de deuda soberana en los países más endeudados de la zona euro» explica Eric Dor, director de Estudios Económicos del IESEG School of Management. La Fed «no tiene ese problema» En consecuencia, esa diferencia de tasas juega «muy a favor del dólar». Además, la guerra en Ucrania y la dependencia europea ante los hidrocarburos rusos refuerzan la «creciente incertidumbre» que sufre la economía de la zona euro, agrega. Cerca de la mitad de los productos importados en la zona euro son facturados en dólares, y menos del 40% en euros, según Eurostat. Es el caso del petróleo o el gas, y de muchas materias primas, cuyas cotizaciones se han disparado en el contexto de la guerra en Ucrania Pero con la depreciación de la moneda europea, se necesitan más euros para comprar los productos importados en dólares, lo que contribuye a acelerar la inflación. Y si esta subida de precios no está acompañada por un alza de salarios, se produce una pérdida del poder adquisitivo de las familias. (La Hora 24.08.22)
