Existen dudas sobre traspaso de la autopista Palín-Escuintla
De acuerdo con la información recabada, el próximo 24 de abril de 2023, la empresa Marhnos deberá devolver al CIV la concesión que fue otorgada a finales de la década de 1990 y que fue impulsada por la administración de Gobierno de ese momento. La autopista Palín-Escuintla fue el primer modelo de cobro de peaje en el país; es decir, con un sistema de pago para poder transitar, y a cambio se le brinda un mantenimiento constante por el paso de automotores particulares, comerciales y de transporte de pasajeros y carga. Pero también está habilitado la carretera antigua de Palín-Escuintla, conocida como “piedra del Quetzal”, en la cual es de libre acceso y los usuarios no pagan para utilizarla. Según el sitio de Marhnos, se cuenta con 22.8 kilómetros de autopista concesionada bajo la modalidad de Alianza Público-Privada, un esquema que permite al sector público contar con la infraestructura necesaria para proveer servicios mediante el uso de recursos de gobierno y del sector privado. Marhnos también deberá entregar una serie de indicadores, entre otra información, para lo cual hay un periodo de transición. La referida unidad y el CIV deberán de informar la intención de la administración de la autopista, es decir cuál será el futuro cercano. Héctor Fajardo, directivo de la Coordinadora Nacional de Transporte (CNT) y Abraham Rivera, alcalde de Escuintla, expusieron a Prensa Libre que desconocen cual será el futuro de la administración de la autopista, y solo saben que será entregado al CIV; pero ya hacen algunos planteamientos que siguen una lógica económica. Fajardo expresó que esta es una de las rutas más estratégicas e importantes para el sector transporte y es una de las pocas que se mantiene en buen estado porque se le brinda un mantenimiento permanente por parte de la empresa que opera la administración, lo que es posible porque se paga por el paso. (Prensa Libre 10.04.23)