La inflación de la zona euro siguió cayendo en febrero hasta el 2.6%
La inflación de la eurozona mantuvo en febrero su tendencia al repliegue, situándose en un 2.6% interanual, aunque a un ritmo menor de lo esperado, y ahora el Banco Central Europeo (BCE) deberá evaluar si la trayectoria permite un recorte de tasas de interés. La agencia europea de estadísticas Eurostat anunció este viernes que la inflación de febrero fue dos décimas inferior a la de enero, cuando se situó en un 2.8 por ciento. El resultado de febrero, sin embargo, quedó marginalmente por encima de las proyecciones de los analistas de las consultoras Bloomberg y Factset, que esperaban un índice de 2.5 por ciento. El 2.6% de febrero y la lenta pero continuada tendencia al retroceso hace que el índice se aproxime a la meta establecida por el BCE. El instituto emisor busca un incremento de precios de en torno al 2% en la eurozona, conformada por 20 de los 27 Estados de la Unión Europea. El BCE está así ahora bajo presión para comenzar el proceso de reducción de sus tasas de interés, que subió progresivamente durante 2023 para contener la inflación. En octubre de 2022, cuando la guerra en Ucrania promovió un alza súbita en los precios de la energía, la inflación alcanzó un tope de 10.6 por ciento. La denominada inflación subyacente –que excluye a la energía y los alimentos– desaceleró en febrero y quedó en 3.1%, frente al 3.3% de enero. (eleconomista.mx 01.03.24)