Se frenó la pérdida de empleos formales
Los golpes de la pandemia alcanzaron a los empleos formales. El Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) reportó una baja de 107 mil 612 cotizantes desde que comenzó el confinamiento y las empresas tuvieron que detener sus operaciones. Sin COVID-19, en enero se contabilizaban un millón 349 mil 864 de cotizantes. La cifra cambió en julio a un millón 242 mil 252. Una baja del 7.97 por ciento, de acuerdo con las cifras de la Dirección de Recaudación de la Subgerencia Financiera. No obstante, las estadísticas muestran que a pesar del confinamiento se registraron nuevas inscripciones de marzo a julio de 35 mil 128 cotizantes. Al inicio de la pandemia se calculaba que se perderían 115 mil empleos formales y se llegó a pensar que podría llegar a 1.5 millones de plazas. “No sabíamos cuánto tiempo iba a estar cerrado el país. Pero el dato ya no es válido porque se abrió más rápido”, explica el director ejecutivo de la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa), Juan Carlos Zapata. (El Periódico 23.09.20)
