Factura petrolera cayó 34% en el 2020
La pandemia provocó que la factura petrolera reflejara una drástica reducción que redireccionó la diferencia al consumo de alimentos, telecomunicaciones y salud, lo que pudo representar un cambio en el patrón de adquisiciones en los hogares. Por primera vez en una década, el costo por las importaciones de los derivados del petróleo se contrajo 34.3%, explicada por la disminución del consumo y las importaciones por el confinamiento decretado el año pasado para contener los contagios de coronavirus, así como el comportamiento de los precios a escala internacional. Al haber menos demanda, hubo una mayor disponibilidad de dinero en los hogares que se dirigió en por lo menos tres grandes sectores en medio de la pandemia en Guatemala. El tráfico o congestionamiento en las calles –o la falta de estos– es un indicador visible del comportamiento del consumo y la economía, según representantes de las compañías importadoras de estos bienes y de autoridades. En 2020 el precio promedio del barril de petróleo fue de US$39.40, y para 2021 se plantean tres escenarios: el más alto US$62.70; el medio, de US$52.20; y el bajo, de US$41.62, según dieron a conocer por las autoridades monetarias el jueves 18 de febrero. (Prensa Libre 25.02.21)
