Consumo de los hogares pierde dinamismo en el primer trimestre
La economía guatemalteca depende del consumo privado, que en los primeros meses del año tuvo una desaceleración que se atribuye al incremento de precios en la mayoría de bienes y servicios, así como a la “normalización” luego de la recuperación económica en 2021 tras los efectos iniciales de la pandemia. El Banco de Guatemala (Banguat) estimó que el consumo privado creció 4.9 por ciento en el primer trimestre de 2022, por debajo del 5.5 por ciento del mismo periodo del año anterior, en el informe indica que se debe al aumento del empleo, las remesas y el crédito. El aumento del precio de los combustibles y de los alimentos incide en el consumo de los hogares, y de continuar la desaceleración se esperaría un impacto en el producto interno bruto (PIB) debido al peso que tiene este gasto en la economía, dijo el exministro de Finanzas, Juan Alberto Fuentes Knigth. El consumo privado tiene un peso de 86 por ciento en el PIB y el del gobierno representa el 11.3 por ciento. El reporte del Banguat refleja que el consumo final de las entidades gubernamentales aumentó más que el de los hogares, alcanzando 6.4 por ciento, lo que se atribuye a gasto en remuneraciones, útiles y valija didáctica, combustibles y lubricantes, materiales médico-quirúrgico y de vacunas contra el COVID-19. (El Periódico 11.07.22)