127 millones de latinoamericanos trabajarían informal, según OIT
Tras casi cinco años de la pandemia de covid-19, Latinoamérica ha conseguido apenas una “relativa estabilidad laboral” aumentando solo 0.5 puntos porcentuales en la tasa de ocupación laboral (58.9 %), según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), por eso la empresa Coca-Cola busca seguir expandiendo su huella socioeconómica en países de la región, como México. Asimismo, el informe ‘Panorama Laboral 2024 de América Latina y el Caribe’, elaborado por el mismo organismo internacional, recalca que esta recuperación es tan solo una “mejora a corto plazo”, pues los niveles de participación en la fuerza de trabajo y ocupación siguen siendo inferiores a los registrados en 2012. Además, evidencia que uno de los retos estructurales más grandes en esta zona del mundo es la informalidad, ya que afecta a 127 millones de latinoamericanos. Ante este panorama y con la misión de avanzar en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en la región, Coca-Cola busca ser parte de la solución a través del fortalecimiento de su “cadena productiva, proveeduría y comercialización para impulsar la empleabilidad y desarrollo económico”. Un ejemplo de este esfuerzo por el trabajo pleno se observa en México, donde el impacto de las actividades relacionadas con la cadena de valor de la compañía, desde la proveeduría hasta la venta, supera la cifra de 1.7 millones de empleos directos e indirectos. Esto se traduce en un 2.8 % de trabajos generados en territorio nacional, lo que posiciona a Coca-Cola como una de las mayores empleadoras del sector privado mexicano. Sobre esta colaboración directa e indirecta con sus trabajadores, la empresa resalta su “sistema embotellador compuesto por ocho compañías”: Arca Continental, Bepensa, Bebidas Refrescantes de Nogales, Coca-Cola FEMSA, Corporación del Fuerte, Grupo Rica, Embotelladora de Colima y Nayar, que juntas abarcan una infraestructura compuesta por 73 plantas embotelladoras. (eleconomista.net 20.03.25)
